La campa;a mediática que se está llevando actualmente con el asunto de la Ley 30 es una ''guerra de Wilson'' en la se ansía convencer a esa gran horda ignorante que toma decisiones o elige a su comandante, una guerra en la cual está el bando estudiantil y el bando gubernamental, hablaré únicamente del segundo.
En las distintas campa;as políticas transmitidas por los medios de comunicación, en cuanto a la Ley 30, se han evidenciado las ganas de persuadir al público de que la privatización de la educación en Colombia es la vía al desarrollo y multiplicación de un Derecho Humano en sitios que no lo tienen con el fin de lograr la asimilación de ésta en la sociedad colombiana.
La Reforma a la Ley 30 fue aprobada sin la opinión de la gran mayoría de la población, que podría denominarse ''El reba;o a domesticar'', la gran minoría que la aprobó es aquél selecto grupo de intelectuales que gestaron la revolución en el arte de la democracia, logrando así que fuera aprobado algo abominable que desliga al Estado totalmente de su responsabilidad por excelencia, dar a sus compatriotas y electores el derecho a la educación, pero no les conviene que estos tengan el conocimiento y entiendan pos si mismos, si lo obtienen serán más los que tengan el poder y la gran minoría actual no podrá actuar según sus propios y egoístas intereses.
El gobierno colombiano ha emitido comunicados en los Mass Media con contenidos pro Ley 30, la parte más ignorante de la población obedece a esos mensajes debido a que ellos eligieron a esa ilustre élite que ''tiene los mismos intereses que ellos'' y además tienen el poder del conocimiento; los mensajes emitidos resaltan unos ilusos buenos valores en la Ley 30 e implantan una idea de bienestar y conveniencia en la cabeza de la horda ignorante, haciendo que ésta crea que la privatización de la educación y el envío de ésta a manos empresariales será totalmente productivo y generoso con los que no la tienen.
Esa gran masa desinformada y manipulada se da cuenta de lo que ocurre gracias al pensamiento crítico y ''las cachetadas'' de los ciudadanos ilustres no pertenecientes a la gran élite, esto efectivamente comprueba que la capacidad de pensar de la mayoría de sujetos está castrada debido a que siempre se les ha dicho qué y cómo hacer las cosas, no son capaces de descubrir las cosas por si mismos.
David Alarcón Vela.
Autentico pero muy tarde
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