viernes, 19 de octubre de 2012

Memento: evocación de la estructura dramática.





Todo tipo de producción audiovisual obtiene su sentido a partir de los mensajes (significados) que es capaz de emitir. Tal y como lo manifiesto Rafael Rafols y Antoni Colomes en su libro Diseño Audiovisual : “ lo audiovisual es un medio de comunicación instrumental que sirve para otros productos y no para si, debido a que no tiene autonomía pues está en función de otro”. Lo que permite evidenciar que, en el caso de las elaboraciones audiovisuales como la cinematografía, los videos clips, entre otros, este tipo de producciones encuentran su génesis y fundamento a partir de la manipulación de los elementos que componen una situación con el objetivo de crear una interpretación/apropiación especifica en el espectador. Y es a esta elección consiente de elementos lo que comúnmente conocemos como drama. No obstante, el drama y su correspondiente mecanismo de creación están conformados por cuatro componentes básicos e inexorablemente a cualquier historia, los cuales son: personajes, acciones, lugares y tiempo.

A partir de lo anterior, se deduce entonces que la elaboración de significados esta determinado por un “aforismo” (denominado estructura dramática) encargado de organizar y servir de armazón a los elementos que sustentan el drama de la historia. Si no existiese dicho esqueleto, cualquier tipo de percepción individual estaría, seguramente, condenado a subsistir en la ambigüedad y la abstracción conceptual. Para esto,  es necesario mencionar que la estructura dramática no es inmutable, es decir, su esencia esta en el cambio, el movimiento, la dinamización y el ritmo. Sin embargo, resulta importante dejar en claro que esta “está determinada en gran parte por el medio utilizado para contar la historia”, puesto que no se construye de igual forma una estructura dirigida al cine que una de televisión.

Por otra parte, cabe resaltar que el conocimiento obtenido a cerca de la estructura dramática no sólo ejerce su papel catalizador en los ámbitos de creación e innovación audiovisual, sino que, además de esto, facilita el análisis y el discernimiento del proceso interpretativo inmerso en los siguientes lineamientos expuesto por Syd Field:

·         Paradigma de personaje: esta conformado por la vida interior y la exterior. La primera se encarga de narrar lo vivido por el personaje hasta el inicio de la historia, mientras que la segunda abarca su proceder y necesidad a partir del inicio de la misma.


·         Paradigma de asunto: Aquí se aborda el primer cuestionamiento de toda narración ¿de qué trata la historia? Y esta se determina a partir de la vida exterior del personaje.
 

·         Paradigma de estructura dramática: Es el procedimiento mediante el cual se estructura “la historia completa, desde la primera escena hasta la última”. En el caso de Field se mantiene una estructura básica de Establecimiento de la acción (inicio), confrontación (desarrollo) y resolución.


Es preciso dejar en claro que la estructura de Field está fuertemente influenciada por los lineamientos del teatro clásico griego, razón por la cual es evidente su construcción lineal y/o cronológica.

Aunque esta estructura no es ejercida de forma dogmática, puesto que ha sido modificada en un sin número de ocasiones.  Tal es el caso de la película Memento, dirigida por Christopher Nolan, en donde Leonard (protagonista de la historia) ha perdido la memoria a corto plazo a partir del instante en que fue golpeado mientras intentaba defender a su esposa que estaba siendo violada y que, posteriormente, fue asesinada. De allí en adelante, Leonard tiene cómo objetivo encontrar a los responsables para cobrar venganza, sin importar las dificultades en la investigación que tendrá a causa de su problema de salud.

No obstante, más allá del argumento narrativo lo verdaderamente trascendental en la película esta ligado radicalmente con su estructura dramática, en donde que los cánones de los lineamientos temporales se encuentran parcialmente quebrantados ya que la estructura ha sido organizada de tal forma que las consecuencias antecedan a las causas y el “futuro” impere sobre el “pasado”. Aquí se hace necesario  una visualización (re-creación) de la estructura dramática, puesto que a lo largo del film persiste una dialéctica conceptual entre estos dos lineamientos que es claramente percibido a través del tratamiento estético que recibe cada unos de estos. Y para  lograr ello, el directo optar por disponer - de forma intercalada y totalmente “anacrónica” – secuencias en blanco y negro y a color que se encargan de establecer consecuente y recíprocamente el drama de la historia.

A pesar de todo lo expuesto, aún falta por desplegar la característica que dota a Memento de una propiedad especial frente a los otros tipos de film que ejecutan estructuras de tiempos alterados: aquí el montaje intelectual –y su consecuente estructura de significación- dejan de proceder únicamente en los límites de la metáfora audiovisual y pasan a materializarse en experiencia psico-sensorial. Así, cada espectador esta condicionado a sobrellevar de forma paralela al desarrollo de la película la condición de amnesia anterógrada que vivencia el protagonista. Lo que significa que, como consecuencia de los continuos cortes (recuerdos) inmersos en la ambigua temporalidad de la película, el espectador pierde reiteradamente  la coherencia y cohesión que presenta la historia debido a se encuentran en la necesidad de relacionar el futuro percibido con algo que aún no ha acontecido. Alineación que sin duda alguna se encarga de producir en cada uno irregularidades cognitivas que terminar por condicionar el proceso vinculado con la interiorización de la estructura dramática.


Jhon Fredy Peña Martínez

Grupo 2 BD

 
 



 

1 comentario:

  1. Extenso y en ocasiones confuso, pero original en sus planteamientos, me gustó.

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